Un nuevo estudio, publicado en Mental Health and Physical Activity, encontró una forma brillante de mantener la motivación para hacer ejercicio. No tiene nada que ver con rutinas de moda tipo Pilates Reformer o Peloton, ni tampoco se trata de comprar un suplemento para energizar el cuerpo. Es algo más “mental”.
¿Alguna vez te ha dicho un instructor de fitness que la mente se rinde antes que el cuerpo? Esto es cierto en cualquier entrenamiento intenso, y las investigaciones demuestran que también aplica a la hora de encontrar la motivación para levantarse y hacer ejercicio.
Las personas tienden a desestabilizarse al pensar en el tiempo y la energía que dedicarán al ejercicio. Para combatir esto, los investigadores querían comprobar si la atención plena (mindfulness) podía ayudar a superar este bloqueo mental. Y funcionó, pero con una salvedad.
Quienes realizaron ejercicios de atención plena y registraron sus entrenamientos fueron las personas con mayor motivación para hacer ejercicio. Es más, esto se tradujo en un aumento inmediato de la actividad física en los primeros días del estudio.
Detalles de la investigación
Para el estudio, los investigadores dieron seguimiento a 109 adultos sedentarios de Inglaterra, específicamente, aquellos que no cumplían con los niveles recomendados de actividad física semanal.
Durante 30 días, cada persona recibió instrucciones de dar 8000 pasos al día usando un rastreador de pasos. La mitad caminó mientras escuchaba una sesión diaria de mindfulness a través de una aplicación móvil, centrándose en la conciencia corporal, el movimiento y el ejercicio.
Después de ese tiempo, ambos grupos mostraron un aumento en su actividad física. La actividad sedentaria también disminuyó en ambos grupos. Sin embargo, un grupo hizo significativamente más ejercicio que el otro.
Las personas que usaron el rastreador y la aplicación de mindfulness mostraron un promedio de 373 minutos de ejercicio moderado por semana, en comparación con los 297 minutos de quienes solo usaron un rastreador de pasos.
Los del grupo que utilizó la app de atención plena también redujeron su tiempo sedentario en nueve horas a la semana, mientras que los del grupo que no escuchaba las sesiones disminuyeron su actividad en nueve horas semanales.
En resumen: si no consigues la motivación para hacer ejercicio, prueba algunas sesiones de atención plena o mindfulness. Luego, una vez que te sientas inspirado y te pongas en movimiento, registra tu entrenamiento. Y sigue haciéndolo.
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